Conciliaciones entre arrendador e inquilino: Soluciona conflictos sin juicios costosos
Los conflictos entre arrendadores e inquilinos son más comunes de lo que parece: rentas atrasadas, incumplimiento de cláusulas, daños al inmueble, entre otros. Pero no todos los problemas deben terminar en tribunales. En Inmobirrey ofrecemos un servicio de conciliación que busca soluciones rápidas, justas y sin pleitos.
¿Qué es una conciliación legal?
La conciliación es un proceso alternativo de resolución de conflictos, donde ambas partes —con la asesoría de un tercero neutral— pueden llegar a acuerdos sin necesidad de iniciar un juicio. Es ideal para conservar relaciones cordiales y resolver desacuerdos de manera eficiente.
¿Cuándo conviene acudir a una conciliación?
Este servicio es útil cuando existen:
- Rentas atrasadas o pagos irregulares.
- Daños al inmueble y desacuerdos sobre reparaciones.
- Incumplimiento de cláusulas contractuales.
- Intención de terminar el contrato anticipadamente.
- Problemas de convivencia u otros desacuerdos cotidianos.
Beneficios de resolver por la vía de la conciliación:
- Ahorro de tiempo y dinero.
- Mayor control sobre el acuerdo (no lo decide un juez).
- Ambiente colaborativo, no confrontativo.
- Posibilidad de preservar la relación arrendador-inquilino.
- Soluciones legalmente válidas, con respaldo jurídico.
En Inmobirrey contamos con especialistas en arrendamiento que actúan como facilitadores legales, guiando el diálogo hacia acuerdos claros y ejecutables, cuidando los intereses del propietario y del inquilino por igual.
Un conflicto no tiene por qué escalar a un juicio. Con la orientación correcta, muchas disputas pueden resolverse de forma amigable, efectiva y con respaldo legal.
Agenda tu sesión de conciliación y evita procesos innecesarios.